Palabras clave: materialidades, acústica, espacio, cuerpo
Partiendo de la pregunta que formula Alejandro Castillejo: ¿Cómo hablar o cómo escuchar lo que se sitúa en el borde externo del sentido? Mi propósito ha sido escuchar, sentir y analizar los archivos sonoros presentes en el Informe de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición de Colombia (CEV). De estas escuchas atentas he derivado en preguntas por la materialidad de los cuerpos que producen estos documentos, teniendo en cuenta que en estas piezas sonoras confluyen múltiples seres humanos y no – humanos, sobre los que han quedado improntas de la violencia, que se expresan de formas no verbales, al tratarse de vivencias y circunstancias desbordadas que en ocasiones no encuentran suficiencia en las palabras y el logos.
Atendiendo a la noción de Castillejo del anti-relato, me interesa la manera en que en el sonido teje y conjura un entramado de tiempos y entidades, que atraviesan la duración y materialidad de los cuerpos que participan en estas polifonías, rompiendo la linealidad narrativa, proponiéndonos entregarnos a la escucha, ofreciéndonos una perspectiva sensible a un pasado-presente que se configura desde percepciones y materialidades.
Partiendo de la escucha que he llevado a cabo de los archivos sonoros, las descripciones y metáforas desde el fenómeno acústico han cobrado pertinencia: espacio, cuerpo, intensidad, tono, timbre, duración. Mi propósito es pensar y localizar redes de resonancias, donde es posible sentir y percibir los ecos de hechos que muchas y muchos no hemos vivido, pero que hacen parte de una geografía común.
Por otro lado, está el silencio y sus connotaciones posibles: silencio de lo humano y de lo no humano. Las tipologías del silencio en los archivos del informe, que depende de las y los participantes que callan: las y los humanes, los animales, el río, la montaña. Así que estas nociones desbordadas, posibles en la escucha, no solo se manifiestan por su presencia sonora en el mundo, sino también por acallamiento.