Título de la reseña: Método de la Secuencia de Desarrollo de la Investigación (MSID): guía para dar sentido a lo que se observa
Título del texto base: El método Spradley en la investigación cualitativa
Elaborada por: Alejandro Cuervo
Fuente: Garrido, Norman. (2017). El Método de James Spradley en la investigación cualitativa. Enfermería: Cuidados Humanizados, 6(spe), 37-42.
El artículo al cual acá se hace referencia trata de exponer el método de la secuencia de investigación desarrollado por James Spradley, que contiene orientaciones básicas para la observación y el tratamiento de la información expuesta a través de una serie de etapas. Spradley crea el Método de la Secuencia de Desarrollo de la Investigación (MSDI) que visualiza el trabajo etnográfico como una secuencia que destaca la característica de la recurrencia entre el análisis de la información recopilada y la necesidad de retornar al escenario. Al centrarse en el trabajo etnográfico, el artículo hace hincapié en la entrevista etnográfica, la cual no tiene un consenso sobre su definición, pero que para Spradley resulta en un recurso para hacer que la gente hable sobre lo que sabe; algunos la califican como un tipo de pregunta en profundidad, mientras que otros la proponen como una entrevista que va desde la no estructuración hasta la formulación de preguntas dirigidas durante las fases que contempla. En este punto, se clasifican cuatro tipos de entrevistas propuestas por Patton:
- Entrevista conversacional informal.
- Basada en un guion.
- Estandarizada abierta.
- Estandarizada cerrada.
Con estos tipos de entrevista, el investigador se convierte en un individuo que participa de las dinámicas de los individuos en su contexto, pues además de anotar la entrevista realiza una observación de ceremonias, juegos, de los que toma nota y aprende de las relaciones de las personas. Aunque no hay una estructura rígida en la realización de una entrevista etnográfica, si se observan unas fases:
- Fase de preparación: establecimiento de objetivos, redacción de preguntas, definiciones de quiénes deben y pueden ser entrevistados, el momento y lugar de ejecución, duración recomendad, tipos de registro.
- Fase de interacción con el entrevistado: se solicita la autorización para el registro del proceso, para el análisis etnosemántico, en el que el discurso se convierte en base del desarrollo de la estrategia del MSDI.
- Fase de desarrollo: en la que se debe mantener la conversación fluida, sin olvidar la guía de preguntas, así como tener presente que el protagonista del diálogo es el entrevistado.
- Fase de cierre de la entrevista: en la que se estimula al entrevistado a profundizar en temas a manera de síntesis y con el estimulo al compromiso de acceder a otra sesión en un futuro próximo.
De acuerdo con lo anterior el MSDI contempla cuatro tareas fundamentales: el establecimiento de los dominios, la taxonomía, los componentes y los temas. Los dominios son categorías de significados culturales que incluyen subcategorías relacionadas semánticamente; Spradley recominda no preguntar por el significado de un término para establecer un dominio sino por el uso del mismo en la cultura. Las taxonomías son construcciones conceptuales que revelan la existencia de subconjuntos de términos relacionados en un todo, que reflejan las relaciones del dominio con sus respectivos términos incluidos que van generando una estructura adecuada para el análisis; en el artículo se da el ejemplo de como el uso “trato con respeto” desprende los términos “tono de la voz”, “actitud de interés”, “palabras simples” y “buenas respuestas”. Los componentes surgen del establecimiento de dominios y taxonomías que permite comprender el significado de un término en la medida en que difiere de los demás; para Spradley, “se trata de conocer el significado de un término dependiendo de lo que significa”. El análisis de componente, enfatiza Garrido, se presenta como una actividad clarificadora que orienta la representación de la información contenida en las respuestas de los entrevistados. Por su parte, los temas intentan describir la cultura observada señalando sus características generales y específicas, se trata de identificar los elementos cognitivos que constituyen una cultura, lo que sus integrantes creen que es y reconocen como real.
Frente a la tarea del análisis de temas, Spradley propone unas recomendaciones para su desarrollo: la inmersión, en la que se propone una exposición prolongada, en la que se dedica a aplicar entrevistas, escuchar, consignar notas de campo y determinar temas culturales; el análisis de componentes vinculados a los dominios, que se realiza para el observador pueda percatarse de una amplia lista de dominios, para conocer los temas comunes de la cultura; identificar dominios amplios, lo que traduce en el establecimiento de dominios que abarcan distintas culturas, es decir que se repiten en otras y que permiten que las categorías puedan ser aplicadas por contraste en otras investigaciones; elaboración de mapas conceptuales, que permite graficar los vínculos identificados entre los dominios, y, finalmente, el reconocimiento de temas universales, que se posa sobre el común denominador de todas las fases y recomendaciones del MSDI, en el que se contrasta la información obtenida en el trabajo de campo, a través de la identificación de similitudes y diferencias entre los términos obtenidos. En está última recomendación, Spradley sugiere observar una serie de temas que tienen el potencial de ser identificados en todas las culturas observadas: conflictos sociales, contradicciones culturales, técnicas informales de control social, estrategias relacionales y el estatus.
Esta guía da un paso fundamenta para que los investigadores puedan dar sentido a lo que observan, para que puedan prepara y efectuar con objetivos contundentes aquello que parece caótico en la entrevista y la observación del trabajo etnográfico y cualititativo en general. Tal y como lo enfatiza Garrido, la falta de formación metodológica puede producir daños en los contextos y arriesga el cierre de espacios para futuros estudios. De modo que el MSDI se presenta como un método organizado y acorde que pone en el centro de la atención los sujetos del estudio y les da valor a sus propias construcciones de significado, lo que conlleva una ventaja para el trabajo mancomunado en las investigaciones.